Los puerquitos de piloncillo han conquistado el paladar de millones de mexicanos y aquí te contamos el origen de este pan tradicional.
Uno de los panes de dulce más icónicos de la república mexicana son los puerquitos de piloncillo. Su forma recuerda a un cerdito y muchas veces conseguirla requiere de una gran maestría. Su textura crujiente, el sabor dulce y aroma tostado que suavizan el paladar de cualquiera.
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La panadería mexicana es una de las más ricas de todo el mundo. En las mesas de las familias mexicanas nunca hace falta pan de dulce para acompañar un rico café o chocolate caliente. La riqueza cultural y gastronómica del país ha provocado que exista una gran diversidad de tipos de pan y galletas que endulzan los desayunos y cenas mexicanas.
Sin duda alguna has probado los puerquitos de piloncillo o chichimbré. Y probablemente más de una vez te has preguntado la historia detrás de esta galleta irresistible.
Origen del chichimbré o puerquito de piloncillo
El mestizaje en México ha provocado que la gastronomía del país tenga orígenes que en su mayoría nacieron de la colonia. La mayoría de los platillos emblemáticos salieron de las cocinas de los conventos como el rompope, mole, chile en nogada y tantas delicias que conforman a la tradicional gatronomía mexicana.
Estas galletas con forma de cerdito son más obscuras que cualquier otra variedad y es así por su ingrediente principal: el piloncillo. Además con la canela genera un aroma que es irresistible para cualquiera.
Según la Secretaría de Cultura de México, es nativo puntualmente de Tamaulipas, y con los años ha logrado trascender al resto de la huasteca, arraigándose en la gastronomía típica de la zona y considerándose como un postre artesanal.
La etimología del nombre de la galleta involucra incluso a un platillo inglés. Diversas fuentes señalan que el nombre de este pan en realidad es un ingles más pronunciado y deriva del ginger bread, pan de jengibre. Obviamente que en México el jengibre se sustituye por el piloncillo y la canela.
Otra versión señala que posiblemente chichimbré deriva del náhuatl, como en la etimología de la palabra de origen náhuatl tzi tzi, que quiere decir delgado, dos veces delgado y la terminación castellanizada bre, como en hechumbre o techumbre.
¿Cómo preparar puerquitos de piloncillo?
Una excelente opción para degustar estas deliciosas galletas es hacerlas desde casa. Así que aquí te dejamos una excelente receta para prepararlos.
Ingredientes:
- 1/4 de taza de agua
- 1/2 cono de piloncillo o 200 gramos
- 1 raja de canela
- 1/2 cucharadita de anís
- 3 tazas de harina
- Una barra y media de mantequilla
- 1/2 cucharadita de polvo para hornear
- 1 huevo + 1 yema para barnizar
Preparación:
- Precalentar el horno a 170 grados Centígrados
- Fundir el piloncillo en una cacerola con el agua y las especias hasta que tome la consistencia de una miel. Dejar enfriar.
- Mezclar la harina y el polvo para hornear.
- Acremar la mantequilla y agregar poco a poco la mezcla de harina hasta que tome una consistencia arenosa. Poco a poco, incorporar la miel de piloncillo.
- Terminar con el huevo y amasar hasta tener una textura uniforme. Envolver en plástico transparente y dejar enfriar en el refrigerador por media hora.
- Enharinar una superficie y estirar la masa con un rodillo. Dar forma con un cortador de galletas y pasar a una charola con papel encerado o tapete de silicón.
- Dejar enfriar otros 15 minutos.
- Barnizar cada puerquito de piloncillo con yema de huevo y hornear por 15 minutos.
- Dejar enfriar.
Y listo, no olvides acompañarlas con una deliciosa taza de café de olla o chocolate caliente.
